DIVERSIFICACIÓN DE LA OFERTA O TRANSICIÓN ENERGÉTICA JUSTA.

La transición energética se ha convertido hoy en un tema fundamental a nivel global asociado al “cambio climático” y debería ser prioritario en las agendas que compiten por la presidencia de Colombia.

La propuesta de Rodolfo Hernández reduce la transición energética a la diversificación de la oferta energética que es la política del Gobierno Colombiano a favor de las empresas transnacionales, razón por la cual respalda los pilotos de fracking, ‘‘Kalé’ y ‘Platero’ autorizados a Ecopetrol. Se refiere a que la Guajira sea un Departamento de potencial energético eólico y solar, sin tener en cuenta que los grandes parques energéticos causan graves daños al ambiente y que no resuelven las necesidades prioritarias de consumo de las comunidades a nivel local sino que estimula el despilfarro energético al promover la exportación y el mayor consumo a nivel internacional.

La propuesta del Pacto Histórico busca desescalar gradualmente la extracción minero energética (petróleo, represas) prohibiendo la exploración y explotación de los yacimientos no convencionales (Fracking) y no otorgando nuevas licencias para la exploración de hidrocarburos ni minería a cielo abierto, ni la construcción de más hidroeléctricas. El propósito es transitar hacia otras formas de energía como la solar y eólica en cumplimiento de los acuerdos derivados de las cumbres climáticas de París (2015) y Glasgow (2020) para la reducción de los gases de efecto invernadero como el CO2.

El problema está en que no define con claridad si la transición se realiza desde lo público, (Ecopetrol) y las empresas de energía de los departamentos y si respalda las energías renovables en cabeza de las comunidades, los barrios, las organizaciones sociales o comunitarias y los municipios.

La claridad es fundamental debido a que el Consejo de Empresas Americanas, expresaron su respaldo a las propuestas de Petro “en cuanto a las energías renovables, asegurando que sus empresas estaban invirtiendo cada vez más en investigación para generar este tipo de tecnologías".

Desde las cumbres climáticas se promueve la sustitución de fuentes energéticas fósiles (carbón, gas, petróleo) por fuentes de energía renovables (solar, eólica, geotérmica), bajo el supuesto de que el mercado es el principal escenario para controlar la crisis ambiental, creando la idea de nuevos mercados limpios, para la reproducción del capital, la superación de las crisis económicas y energéticas, sin afectar las relaciones sociales y de producción del sistema capitalista, formalizando como principales objetivos la ampliación de la matriz energética y una geopolítica del cambio climático que genere nuevos modelos de gestión en los territorios, en relación con el manejo del agua y la biodiversidad.

La inversión transnacional en investigación para la generación de las energías renovables, reconocidas como Mecanismos de Desarrollo Limpio, está asociada a los bonos carbono, que hacen parte de los Proyectos REDD+, y son una forma de financiación del medio ambiente lo cual está creando en la práctica derechos de contaminación, lo que permite que los países industrializados y empresas contaminantes reduzcan sus emisiones de GEI en países periféricos a través de proyectos de energía limpia donde les resulta más económico y rentable.

 

Se trata de la mercantilización de la naturaleza concebida como un activo financiero, razón por la cual, las trasnacionales están interesadas en invertir en la Amazonía, el Macizo Colombiano, los páramos, parques naturales y Serranías como la de Chiribiquete convirtiéndolos en sumideros de carbono, como "servicios ecosistémicos" que se cubren con Pagos por Servicios Ambientales a través de los "bonos carbono", el gran  negocio especulativo del capital financiero.

Durante el Foro sobre Transición Energética organizado por la Mesa Social Minero Energética Ambiental -MSMEA- a solicitud de la Comisión Programática del Pacto Histórico sobre transición energética, las organizaciones Censat Agua Viva y Asoquimbo, realizaron sus respectivos aportes que son productos de la sistematización de las conclusiones del II Encuentro Nacional del Movimiento Ríos Vivos “Construyendo propuestas para una transición energética justa que implica, desfosilizar, desprivatizar, desconcentrar, descentralizar, desmercantilizar, democratizar, es decir, por un modelo minero energético soberano y autónomo para superar la crisis civilizatoria cuyas manifestaciones se expresan en la crisis climática y las pandemias que de no actuar nos conduciría a la destrucción de la vida en el planeta.

Como Defensores del Territorio convocamos a apoyar la fórmula Petro - Márquez para un nuevo gobierno, comprometidos con nuestra propuesta de transición ecológica y energética justa en contra de las soluciones que plantea el capitalismo verde de mercantilización y financierización de la naturaleza.